Durante mi etapa académica, mi proyecto de fin de carrera se centró en la búsqueda de señales de materia oscura en las desintegraciones del bosón de Higgs en el CERN, utilizando para ello el aprendizaje automático. Eso me llevó a trabajar con inteligencia artificial y aprendizaje automático en mi carrera de patentes.
En el día a día, ayudo a los clientes a determinar la patentabilidad de las patentes relacionadas con la IA y su posterior tramitación.
La variedad de aplicaciones de la IA en el mundo real me resulta realmente fascinante. He trabajado con clientes que han utilizado la IA para todo tipo de aplicaciones, desde la mejora de la potencia hasta la racionalización del diagnóstico médico, pasando por el desarrollo de software de reconocimiento de voz, y siempre es interesante ver las diferentes formas en las que se puede utilizar la IA. También me interesan especialmente los chatbots de IA que están surgiendo y su potencial aparentemente ilimitado.